miércoles, 5 de agosto de 2009

La verdadera amistad


Proverbios 17:17 dice: En todo tiempo ama el amigo y es como un hermano en tiempos de angustia.


Antes que nada debemos definir que es amistad. Según el diccionario, amistad es: confianza y afecto desinteresados con otra persona y que nacen y se fortalecen con el trato.


Ahora, debemos tener en cuenta que Dios nos creó en sociedad, es decir no quiere que vivamos como personas solitarias sino que tengamos relaciones de amistad, pero de verdadera amistad.


Para tener amigos verdaderos debemos tener en cuenta dos puntos que debemos cumplir:

-Amarse a sí mismo: si no me amo no voy a lograr amar a los demás; si no le doy importancia a mi vida tampoco voy a lograr darle importancia a la vida de los demás.

-Mostrarse amigo: Un verdadero amigo se encuentra cuando somos capaces de bridar amistad.


¿Cómo reconozco a un verdadero amigo?


Hay ciertas características que ayudan a descurbir si alguien es verdaderamente un amigo o no.


-Un amigo es como un hermano: La verdadera amistad es una confraternidad, es decir, una relación de hermanos que se produce entre personas que no comparten un parentezco de sangre.


-Un amigo es fiel: La amistad no se condiciona dependiendo del momento. Un verdadero amigo no te abandona en los días malos, no te desconoce cuando pierdes o cuando tienes problemas; por el contrario, un verdadero amigo te apoya durante los momentos duros.


-Un amigo edifica: Un verdadero amigo ama, y el amor dbe llevarnos a una mutua edificación. El amigo que ama busca ayudar al otro a levantarse cuando ha caído, siempre busca lo mejor para el otro.


-Un verdadero amigo es sincero: No hay verdadera amistad sin confianza plena y no puede haber confianza si no hay sinceridad con el otro.

El verdadero amigo debe decir la verdad aunque al otro le duela (no hay que ser grosero). Un verdadero amigo nos saca del engaño, nos devuelve la cordura en momentos de necedad.


-Da la vida por el otro

Jesús dio la vida por nosotros, él murió en la cruz para darnos una vida digna.

Juan 15:15 dice "ya no los llamo siervos, porque el siervo no está al tanto de lo que hace su amo; los he llamado amigos, porque todo lo que a mi padre le oí decir se lo he dado a conocer a ustedes".


Qué gran privilegio tenemos al saber que por sobre todas las cosas contamos con un amigo fiel que siempre está con nosotros y que se puede ocupar de nuestra vida entera... Jesús.